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Al llegar a la cosmopolita capital de Malasia cuesta creer que tan solo tenga 150 años. Kuala Lumpur en malayo significa "confluencia de un río turbio". A las orillas del río Klang, un pueblo chino con minas de estaño creció hasta transformarse en una de las mayores ciudades del país y en una de las más emocionantes del mundo.
Kuala Lumpur, al igual que las grandes capitales asiáticas, es una mezcla de viejo y nuevo. Los hermosos edificios coloniales del siglo XIX de la plaza Merdeka se hallan a la sombra de la arquitectura más grandiosa y espectacular del mundo. No hay nada más grandioso que las emblemáticas torres gemelas Petronas, en el pasado las de mayor altura del mundo.
El contraste lo ofrecen las cuevas de Batu, a las afueras, al norte. Alojan el santuario hindú más sagrado del país. El Instituto de Investigaciones Forestales de Malasia cuenta con una impresionante pasarela cubierta, justo encima de la selva tropical. Lo único comparable a esta vista es el deslumbrante espectáculo de luces que celebran cada noche las luciérnagas de Kuala Selangor.
La mayor ciudad de Malasia tiene numerosas atracciones y, además, es un lugar perfecto donde pasear. El amplio espectro de culturas de la urbe, como la malaya, la china y la india, significa que la cocina, al igual que las conversaciones que se escuchan en la calle, es profundamente diversa. Los lugareños tienen fama de ser amables con los turistas y, siendo una ciudad tan cosmopolita, muchos hablan inglés y son rápidos en ofrecer una sonrisa y ayuda con las direcciones.
Visite en el centro el Triángulo de Oro, donde encontrará los mejores restaurantes, locales nocturnos y centros comerciales, muchos centros comerciales. KL, como la denominan los lugareños y los entendidos, tiene más de cincuenta centros comerciales: dos de ellos se cuentan entre los más grandes del mundo, el Berjaya Times Square y el Mid Valley Megamall.
Los mejores restaurantes de KL ofrecen desde comida callejera hasta una elegante cocina, con una amplia oferta para todos los bolsillos. La ciudad está especializada en la cocina asiática, no solo malaya, china e india, sino que también sirve buena comida de prácticamente cualquier gastronomía del mundo,
pero lo que caracteriza a Kuala Lumpur son sus mercados. Para disfrutar de la verdadera experiencia KL, visite un mercado nocturno y deléitese con las vistas, los sonidos y los aromas de la ciudad. Busque gangas en Chinatown o eche un vistazo a Brickfields, donde se ubica Little India, y pruebe los restaurantes de arroz servido en hoja de plátano. Si aún no está listo para irse a dormir después de todo esto, no se pierda los puestos de Mamak. A los malayos de toda condición les encantan estos establecimientos de curry, abiertos las 24 horas. Otra forma de entender la noche.